“En la historia de la música, el Festival de Woodstock representa el origen de los festivales de música rock y otros géneros similares del siglo XX.
Woodstock es el símbolo de los valores que lideró la juventud intransigente y rebelde del siglo XX”.
En la historia de la música, el Festival de Woodstock representa el origen de los festivales de música rock y otros géneros similares del siglo XX.
Woodstock es el símbolo de los valores que lideró la juventud intransigente y rebelde del siglo XX.
Para entender los excesos que se vivieron en estos festivales de la música debemos referirnos al entorno que vivió la juventud de aquel tiempo.
En los años 50 surge la generación de los hípsters. Eran grupos de jóvenes que no compartían los valores tradicionales de una sociedad americana ultraconservadora y poco tolerante, eran fanáticos del jazz y de la vida espiritual y libre.
El movimiento hippie cobra fuerza a partir de los años 60, en plena guerra contra Vietnam. Se inició en Berkley y San Francisco (California). Este grupo “contracultural, pacifista y libertario”, integrado por jóvenes blancos de clase media, promovía el amor libre y, al mismo tiempo, la vida espiritual basada en las religiones de oriente. Estos jóvenes se oponían a la guerra, al consumo excesivo y a los valores conservadores de esa época.
Los hippies fueron famosos por sus vestimentas excéntricas y coloridas, por sus gafas de marco metálico y redondo, con vidrio tornasolado (rosado, marrón o azul), por sus balacas puestas sobre sus cabellos largos y desordenados (que hacían juego con sus barbas caóticas y de gran extensión), por sus pantalones de bota campana o sus jeans, y, por supuesto también, por sus slogans y el símbolo de amor y paz que copiarían todos los jóvenes norteamericanos en los 60, y los latinoamericanos en los 70.
Los hippies propiciaban la práctica de la tolerancia, la solidaridad y la fraternidad y se distinguían, además, por su ánimo imperturbable: nada parecía afectarlos, el nirvana, la paz interior, era su estado natural. El mundo exterior, el que contradecían, podía seguir su curso normal, caótico o pacífico. En realidad, su filosofía se reducía exclusivamente a vivir la vida según sus consignas y slogans, más allá del mundo. Poco o nada les importaba lo que el mundo dijera de ellos.
Se afirma que los “Merry Pranksters” influyeron también en este movimiento hippie. Este colectivo de jóvenes estaba conformado por un grupo de poetas y artistas que se desplazaba por las calles de las ciudades en mini vans o buses pintados con motivos sicodélicos, mientras declamaban su poesía y filmaban, según dicen algunos, todas sus travesuras y excentricidades sin inhibición alguna, gracias al estímulo que en ellos producían todas las sustancias sicodélicas que normalmente consumían. (1)
Los slogans del movimiento hippie eran: “Amor y paz y nada más”, “Haz el amor y no la guerra”, “Sin amor no habrá paz”, “Antes de que alcancemos la paz mundial tenemos que encontrar la paz en las calles”, “Prohibido prohibir”, “La verdadera libertad consiste en el dominio absoluto de sí mismo”, “Sueña con un mundo de amor y paz y lo haremos realidad”, “Quisiera vivir en un mundo donde los rifles dispararan balas de chocolate”, “En asuntos internacionales, la paz es un período de trampas entre dos luchas”. “No hay camino para la paz, la paz es el camino”, “La paz comienza con una sonrisa”, “Cuando me preguntaron sobre algún arma capaz de contrarrestar el poder de la bomba atómica yo sugerí la mejor de todas: la paz”, etc. (2)
En Colombia, la cultura hippie llegó en los años 70. En Bogotá, era común verlos en la zona de Chapinero, vestidos al estilo de los hippies de USA, vendiendo toda clase de mercancía alusiva a este movimiento, mientras vivían a la usanza libertaria que ellos mismos predicaban.
El símbolo más recordado de los hippies fue el logo que Gerald Holton (un diseñador inglés) realizó para la Gran Bretaña en los años 50. Este logo intentaba contrarrestar las consignas de los activistas que promovían la guerra. En él se pueden ver dos letras, la “D” de “Desarme” y la “N” de “Nuclear”, pero también representa a una paloma pisando la circunferencia de la tierra. Este logo está compuesto de un círculo dividido en dos partes iguales por un diámetro (en dirección vertical) y por dos líneas perpendiculares que van del centro hacia abajo. Existen otras interpretaciones sugestivas, se dice que quien lo creó se inspiró en la pintura de Goya en la que aparece un hombre aterrorizado, alzando los brazos antes de su fusilamiento.
Este movimiento hippie estuvo acompañado de otros movimientos, igualmente importantes: el Movimiento Feminista y el Movimiento Estudiantil de Mayo del 69.
En Francia, un grupo de jóvenes de la Universidad de Nanterre organizó varios paros, en mayor de 1969, buscando un cambio en la sociedad conservadora, pacata y poco tolerante de allí. Daniel Cohn-Bendit lideró ese cambio. A estos paros se unieron los obreros de la Fábrica Renault. Este hecho produjo la dimisión de Charles De Gaulle, el presidente francés.
Las mujeres también pondrían su grano de arena en todos estos cambios que se produjeron en aquellos años. En Francia, la abanderada fue Simone de Beauvoir, la pareja de Sartre. La mujer, a partir de allí seguiría ganando terreno y nombre en todas las áreas de la sociedad y el Estado. Ya no sería “el segundo sexo”, sino que caminaría de la mano del hombre con iguales derechos y dignidad, sería la dueña de su cuerpo, por lo que tendría la libertad de decidir en temas en los que en el pasado le era prohibido decidir y podría pasearse con soltura por los salones de la academia, las ciencias y las bellas artes, exponiendo libremente sus ideas, sin que se le pudiera callar o maltratar por ello.
En el contexto de este ambiente convulso y caótico, un joven, Michael Lang, decidió organizar en 1969, el primer Festival de Música Rock, en una granja no muy lejos de Woodstock, una población situada a dos horas y algo más de la ciudad de Nueva York.
EL FESTIVAL DE WOODSTOCK 1969*
El Festival de Woodstock de 1969 (Woodstock Music & Art Fair o Woodstock Rock Festival) se realizó entre el 15 de agosto y el 18 de agosto de 1969. Tuvo lugar en una granja cerca de Woodstock, en Bethel, y albergó a cerca de 500.000 jóvenes.
Fue el primer festival de música rock de esta envergadura. Sólo lo superó el Festival de la Isla de Wight, realizado en 1968, en Reino Unido.
Durante los tres días se presentaron grupos y artistas, de rock, blues y folk, entre otros: Richie Havens, Sweetwater, Bert Sommer, Tim Hardin, The Who, Melanie Safka, el gran Joe Cocker, Joan Báez, Country Joe and the Fish, Ten years after, The Band, Johnny Winter, Quill, John Sebastian, el joven Carlos Santana, Blood, Sweat & Tears, Incredible String Band, Crosby, Stills, Nash & Young, Banda Canned Heat, Mountain, Neil Young, Jimi Hendrix, Janis Joplin, etc.
En este festival se notó la ausencia de artistas tales como The Beatles, The Doors, Led Zeppelin, The Byrds, Tommy James and the Shondells, Los Moody Blues, etc. La mayoría de estos artistas declinó la invitación porque, resumiendo, subestimaron este festival. Ninguno de ellos quería ser uno más de la lista.
En 1969 era poca la información que se recibía del exterior. En Colombia, en ese tiempo, aún no había llegado el movimiento hippie, por lo que de plano se rechazaba todo lo que tuviera relación con estos jóvenes que desafiaban al mundo con su estilo de vida. En ese tiempo, en la sociedad colombiana, este movimiento estaba relacionado con los antivalores, vale decir, con la falta de urbanidad, los excesos, la adicción a las sustancias sicodélicas, el desorden, la falta de civismo, la insubordinación a las normas de convivencia, la excentricidad y la apariencia caótica y anormal. Este fue el sentido que se le dio en Colombia al Festival de Woodstock.
Mientras tanto, en Woodstock, los jóvenes norteamericanos que habían sido seducidos por el joven Lang (que veía en este festival una forma de contribuir a la industria de la música, pero también, un modo de distraer a la juventud y de multiplicar sus ingresos), disfrutaban de la música de sus artistas favoritos en un terreno del norte de su país, muy cerca de Nueva York, donde un granjero tenía un criadero de cerdos.
En el documental “Fiasco Total” de Netflix (alusivo al Festival de Woodstock de 1999) un Michael Lang envejecido afirma que en la organización de todo festival son necesarias tres cosas: un socio adinerado, decenas de millones de dólares y un lugar donde realizar el evento. (3)
Woodstock/69 cumplió con estos tres requisitos. Lang tuvo 3 socios importantes: Artie Kornfeld, Joel Rosenman y John P. Roberts. Aunque inicialmente lo que se buscaba era organizar un estudio de grabación entre ellos, al ver frustrado este proyecto Lang les propuso organizar un festival al que concurrieran los artistas y las bandas del momento. No fue difícil encontrar el lugar, la granja en Bethel. Tampoco fue difícil reunir el dinero. Aunque inicialmente se concibió como un evento gratuito, finalmente decidieron vender boletos que el público podría comprar en las tiendas de discos de Manhattan, o por correo.
Se puede afirmar que el Festival Woodstock fue uno de los menos violentos de esta categoría (sólo se registraron dos muertes- accidentales-), porque corrían otros tiempos y porque los asistentes, casi todos integrantes del movimiento hippie, al propugnar sus ideales de “SI a la paz” y “NO a la guerra” debieron ser coherentes y poner en práctica lo que predicaron.
No obstante lo anterior, hay testimonios de gente que asistió a ese evento, a tenor de los cuales hubo ciertos excesos en el uso de sustancias sicoactivas, que fueron las detonantes de varias escenas y performances poco decentes dentro de los terrenos de la granja, que en ese tiempo hubieran hecho sonrojar a cualquier ciudadano de a pie.
Woodstock/69 no fue ajeno a los problemas que normalmente se presentan en los festivales, hubo problemas en el tráfico por los numerosos atascos que se presentaron mientras los jóvenes llegaban a Bethel, el lugar no estaba bien provisto de agua y alimentos, y no había un centro de primeros auxilios. Sin embargo, el festival fue auxiliado por el personal de la Base de la Fuerza Aérea Stewart, mientras los jóvenes ingresaban al lugar, y también a la salida.
Woodstock/69 dejaría muy alto el nombre de Michael Lang, y gracias a ello seguiría organizando otros festivales similares, hasta el fatídico Woodstock/99, que prácticamente sepultó para siempre a este festival y a sus organizadores.
OTROS FESTIVALES DE WOODSTOCK.
El Festival Woodstock tuvo otras ediciones: en 1979 (para celebrar los 10 años del concierto original se ofreció un festival de rock en el Madison Square Garden), en 1989 (en Bethel para celebrar los 20 años del concierto original. Hubo un aforo de 30.000 asistentes), en 1994 y en 1999.
FESTIVAL DE WOODSTOCK DE 1994**
En 1994, para celebrar los 25 años del primer festival, bajo el lema “dos días más de paz y música”, se organizó el concierto en otra granja, en Saugerties, Nueva York. Hubo un aforo de 350.000 personas. Como hubo restricciones a la entrada y problemas para exigir los boletos, los jóvenes derribaron las vallas y entraron a sus anchas al festival. Este festival se realizó entre el 12 y el 14 de agosto de ese año.
En dicho festival participaron artistas tales como: Sheryl Crow, Live, Collective Soul, Candlebox, Futu Futu, The Goats, Huffamoose, Orleans, The Paul Luke Band, Peacebomb, Rek, Aphex Twin, Joe Cocker, Blind Melon, Cypress Hill (grupo de hip hop), Rollins Band, Melissa Etheridge, Crosby, Stills & Nas, Metallica, Aerosmith, The Cranberries, Zucchero, The Band, Salt’N Pepa, Bob Dylan, Red Hot Chili Peppers, Peter Gabriel, John Sebastian y J-Band, Gil Scott-Heron, Carlos Santana, etc.
El género de música que se escuchó en este festival fue variado: rock, rock alternativo, música pop, rock country, jazz, blues, reggae, música house y dance, música techno, soul británico, hip hop, punk rock, etc.
Este festival también se caracterizó por los excesos. Cuando se presentó el grupo Green Day el público participó en una batalla de lodo que empezó el guitarrista de esta banda y que culminó con el traslado de urgencia del bajista Mike Dirnt donde un ortodoncista, pues fue confundido con el grupo de luchadores del público, por lo que le propinaron gratuitamente varios golpes.
A pesar de este incidente, y de los fuertes aguaceros que acompañaron la jornada, Woodstock 1994 pasó la prueba de fuego.
FESTIVAL DE WOODSTOCK DE 1999***
El Festival de Woodstock de 1999, con el cual se pretendió hacerle un merecido homenaje al que tuvo lugar en 1969, por la celebración de sus 30 años, resultó ser a la postre un verdadero desastre. Woodstock/1999 sepultó para siempre a sus organizadores (en su calidad de realizadores de eventos), y al festival de festivales que se celebraba muy cerca de Nueva York, cada cierto tiempo.
Fue Michael Lang nuevamente quien lo organizó, pretendiendo repetir el éxito de los anteriores festivales. Para ello, se asoció con John Scher, un reconocido promotor de conciertos.
Este festival se realizó entre el 22 y 25 de julio de 1999, en la localidad de Roma, muy cerca de Nueva York..
Cuando el televidente observa el final del documental “Fiasco Total” (2022) de Netflix, con sorpresa y estupor (por las imágenes dantescas que allí aparecen), instintivamente recuerda las palabras de John Scher al comienzo del film, cuando dice que el Festival de Woodstock debía representarles a toda costa algún tipo de ganancia.
Es posible que esta apuesta de Scher, por evitar lo que había ocurrido en 1994 (cuando el público asaltó las vallas y entró gratuitamente a los conciertos) haya sido una de las causas que llevaron a Woodstock/99 al fracaso. Al final de este escrito explicaré por qué.
Esta vez, Lang y sus socios escogieron como lugar del festival una base militar, concretamente la Base de la Fuerza Aérea Griffis. Este terreno resultaba perfecto para organizar toda la logística: podría albergar los dos escenarios principales (y otros secundarios), al público, las fuentes de agua, los puntos de venta de alimentos, los baños públicos, los parqueaderos, el centro de primeros auxilios y en una de las alas, a los tráilers, los camerinos y las limusinas y automóviles de los artistas invitados, pero lo más importante de este lugar era su mapa y distribución: estaba perfectamente delimitado y gracias a ello se podría rodear con vallas de madera de cierta altura, con lo cual se podría controlar la entrada del público y la entrega de los boletos. Además, contrataron a la Policía de Nueva York como centinelas de seguridad. Para los organizadores era el lugar ideal.
A pesar de tener aparentemente todo bajo control, los problemas no dejaron de aparecer y de multiplicarse desde el comienzo: los atascos en las carreteras que llevaban a la base alarmaron a los vecinos, esto generó caos en la base militar. Cuando los jóvenes llegaron a la entrada del lugar, les revisaron sus pertenencias y no les permitieron entrar ninguna botella de líquido. Todas las botellas de agua que habían llevado para hidratarse durante el concierto, recordemos que era verano, les fueron confiscadas. Esta fue el primer detalle que disgustó a los jóvenes. Al carecer de agua se vieron obligados a buscarla en los puntos de venta dispuestos allí.
Ahí surgió un nuevo detalle engorroso: el público descubrió que el agua y los alimentos (snacks, emparedados, etc.) que habían dispuesto en el lugar tenían precios inauditos, por lo que la mayoría decidió beber agua de las fuentes que habían distribuido allí, otros debieron comprar las botellas de agua y los alimentos en los puntos de venta.
En “Fiasco Total” varios de los asistentes a este evento, ya adultos conceden varias entrevistas. La mayoría reconoce que fue a ese festival en busca de experiencias exóticas y nuevas, pero, sobre todo, con la idea de escuchar en vivo y en directo a sus bandas y artistas preferidos. Todos, sin excepción, en 1999, eran jóvenes, casi adolescentes. Algunos compraron la boleta sin el permiso de sus padres, que, resignadamente, debieron aceptar, al final, que sus hijos e hijas se unieran como copilotos o invitados del amigo, amiga o novio, que conducía el auto hacia algún lugar desconocido e incierto de su país.
Había cerca de 400.00 personas hacinadas en el auditorio principal en los conciertos (que nutrieron los hoteles, moteles, bares y otros establecimientos públicos de Rome).
MTV fue contratada para la transmisión del festival.
Durante los dos primeros días el festival transcurrió aparentemente con normalidad. Del jueves 22 de julio al domingo 25 de julio hicieron su aparición bandas y artistas de rock como Red Herring, Vertical Horizon, The String Cheese Incident, Oleander, Lit, Buckcherry, The Roots (un grupo de rap alternativo), Insane Clown Posse (dúo de rap), George Clinton And P-Funk All Stars, el icónico James Brown, G. Love & Special Sauce, Jamiroquai, Live, Sheryl Cow, DMX, The Offspring, Korn, Bruce Hornsby, Everclear, Los Lobos, Kid Rock, Counting Crows, Alanis Morissette, Limp Bizkit, Rage Against The Machine, Metallica, Mike Ness, Our Lady Peace, Rusted Root, Sevendust, Willie Nelson, Everlast, Jewel Kilcher Creed. Red Hot Chili Peppers, etc. Los géneros musicales fueron muchos: rock, rock alternativo, punk, hip hop, metal, pop, punk rock social, rap metal, etc.
La violencia y el desorden se desataron en la noche del sábado, cuando apareció el grupo Limp Bizkit sobre el escenario, interpretando sus canciones con una alta dosis de agresividad. Con ello invitaban a los asistentes a perder la razón. Para ese momento, los jóvenes estaban prácticamente intoxicados por el consumo de alcohol y sustancias sicoactivas. En el documental de Netflix se puede observar a varios de ellos completamente fuera de control. En las imágenes se ven algunos jóvenes que incitan a las mujeres a despojarse de sus atuendos, mientras que varias de ellas, mareadas e inconscientes, vuelan sobre los brazos de otros, que practican el crowd surfing con ellas.
Las imágenes de este documental sorprenden al espectador. Lo dejan mudo. Un flashback le recuerda las protestas de los estudiantes en Nanterre y las múltiples marchas de las mujeres por alcanzar esos derechos y libertades que en otro tiempo solamente tuvieron los hombres, y lo obligan a preguntarse por la razón de estos excesos, si valió la pena hacer caso a las protestas del siglo pasado de los jóvenes y las mujeres. El infierno que se ve allí obliga al televidente a entrar en trance, a reflexionar sobre la humanidad, a concluir que en las postrimerías del siglo XX la humanidad tampoco había alcanzado la mayoría de edad, esa que predicaron varios pensadores de otros tiempos.
Para cualquier televidente desprevenido este documental representa la antítesis de todo lo que representa América para los americanos y para el resto del mundo, eso que aprendió en la escuela y la universidad.
Las escenas de este documental son dantescas: caos, jóvenes cubiertos de lodo, las instalaciones destrozadas, basura y despojos por todas partes, vallas y murales derribados a la fuerza, jóvenes enloquecidos.
Los organizadores deciden enviar de regreso a casa a cada artista que termine su presentación. No hay lugar para ninguna celebración.
Mientras el infierno se desata en “Roma” (pero en Nueva York), los organizadores proclaman la normalidad por la prensa y todos los medios.
Muchos de los jóvenes, cansados ya y sin dinero, regresan a sus casas.
Para cerrar con broche de oro, Michael Lang decide repartir entre los asistentes velones y fósforos, para acompañar al grupo que cerraría el festival, los Red Hot Chili Peppers. La presentación de este grupo, con el público disminuido, se inicia sin contratiempos, hasta que en la mitad del concierto una cámara registra lo que parece ser una estela de fuego y chispas al fondo del escenario. Los organizadores no le dan importancia a este hecho aislado, pero unos minutos después, por arte de magia, el fuego se extiende por todo el escenario y se desata otra guerra que ya no puede detener nadie.
La Policía de Nueva York entra con lo que parecen ser bolillos y carros blindados, y finalmente disuelve la manifestación, el desorden y los incendios.
El lunes 26 de julio de 1999 “Roma arde en llamas” y se asemeja al Apocalipsis. En el reporte oficial figuran cuatro casos de violación y una violación en grupo. Se desconoce cuál fue el número real de agresiones de este tipo. Se sabe que una madre inició una acción legal por la violación de su hija.
Es importante aclarar que, los jóvenes se quejaron desde un principio de vivir todo tipo de restricciones y abusos: hubo especulación de los precios de los alimentos y las bebidas, los controles a la entrada del concierto fueron excesivos, habían construido vallas infranqueables en todo el lugar, estaban rodeados por fuerzas de seguridad intimidantes, etc..
Seguramente si John Scher no hubiera pensado tanto en su seguridad financiera y las ganancias que necesariamente le debía reportar este festival, y, más bien, hubiera centrado su atención en el bienestar y seguridad de los jóvenes, en la obligación que tenía cada grupo y artista de evitar la incitación a la violencia, si hubiera organizado una brigada para controlar el consumo de alcohol y sustancias sicodélicas, y si hubiera contratado un proveedor que ofreciera precios justos por una alimentación balanceada (en un concierto en el que se sabía que se iban a consumir bebidas alcohólicas en exceso) el infierno de Woodstock 1999 jamás hubiera existido.
Michael Lang, el promotor de todos los “Festivales Woodstock”, murió a los dos meses de haber sido entrevistado para el documental “Fiasco Total” de Netflix. En la memoria de los empresarios de festivales y conciertos quedará la impronta de sus consejos, no sólo los que tienen que ver con los tres factores que contribuyen a que cualquier festival al estilo Woodstock tenga éxito, sino también, por supuesto, toda la experiencia amarga de Woodstock 1999. Esa que se debe evitar a toda costa.
“Cajita de música”
Silvia Castillo
¨*(Fuente/imagehttps://tuoitre.vn/woodstock-tro-lai-50-nam-giay-phut-lich-su-cua-rock-20190324163812169.htm )
**(Fuente/image https://sarqasim.wordpress.com/2014/08/14/woodstock-1994-turns-20-today/ )
***(Fuente/imagehttps://www.google.com/imgres?imgurl=https%3A%2F%2Fwww.yaconic.com%2Fwp-content%2Fuploads%2F2022%2F03%2FEl-trailer-de-Woodstock-99-vuelve-a-visitar-el-caotico.jpg&tbnid=T9yDiemVmh6-3M&vet=1&imgrefurl=https%3A%2F%2Fwww.yaconic.com%2Fwoodstock-1999-festival-violento%2F&docid=Y07vz0nCXMuYiM&w=1280&h=820&itg=1&hl=es&source=sh%2Fx%2Fim%2Fm4%2F3&kgs=52be910713d7494c&shem=abme%2Ctrie )
(1) (Fuente: https://concepto.de/movimiento-hippie/ )
(2) (Fuente: https://psicologiaymente.com/reflexiones/frases-hippies)
(3) (Fuente: “Fiasco Total”, 2022, documental Netflix)
